Hola a tod@s!
Hoy os voy a hablar de la psicología del color y lo que influyen los colores en nuestras emociones, estado de ánimo y actitudes.
Los colores vivos, como el rojo, naranja o amarillo, se asocian al optimismo, así como los colores como el negro o gris los asociamos al pesimismo y la sobriedad.
Nos sentimos diferentes según el color que nos cubre y también transmitimos esa sensación a los demás.
Dividimos los colores en cálidos y fríos, según su pigmentación.
No a todas las personas les favorecen los mismos colores, tonalidades o combinaciones, es por ello que se hace la prueba del color, en la que los colores más apropiados para cada persona se eligen en función de sus caraterísticas físicas, como son la piel, ojos y cabello.
El objetivo de esta prueba es conseguir que el cliente conozca la gama de colores que más le ilumina el rostro, minimiza imperfecciones y lineas de expresión y descartar aquellos que provoquen sombras y realcen imperfecciones de la piel.
Ahora os voy a comentar mi experiencia:
Durante las clases de personal shopper, se me hizo el análisis de color, el cual consiste en ir probándote pañuelos en diferentes colores, agrupados para el profesional en las cuatro estaciones del año: primavera, verano, otoño e invierno, según sean colores cálidos o fríos.
Por mis facciones y color de piel, entre otras cosas, resulte ser otoño. Esto quiere decir que los colores que más me favorecen son los cálidos, como el amarillo, naranja o rojo entre otros.
Colores que ya predominaban en mi armario, aunque también tengo mucho negro, que no es de los que más me favorezca, pero combinándolo con un collar dorado ya me da ese toque de luz que yo necesito para verme mejor.
Con esto os quiero decir que aunque los colores que más os gusten no sean los perfectos para vosotr@s, siempre se puede jugar con los complementos que aporten ese brillo que necesitamos en nuestro rostro y dentro de vla gama de colores que mejor nos sienta.
Espero que os haya gustado y pueda servir de ayuda!